IoT y Turismo
- Dario Ferraté
Es por todos bien sabido que el sector turístico es el sector por excelencia en España y que hace tres años (2013) aportaba el 15,6% del PIB español, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, en inglés).
En 2015, España acariciaba la cifra de 68 millones de turistas y esta cifra no parecía ser el techo… Efectivamente, hoy por hoy, podemos encontrar varios artículos de distintas fuentes que hablan de que este año ya hemos superado los 70 millones, inclusive algunos se aventuran a indicar que llegaremos a los 74 millones, con un crecimiento cercano al 9% frente al año anterior.
Los factores que llevan a los turistas a conocer nuestro país son varios… No entraré a detallarlos porque no es el principal propósito del artículo, pero sí comentaré que en distintos foros y eventos a los que tuve oportunidad de asistir relacionados con “Turismo Inteligente o Smart Tourism”, se indicaba que el turista es cada vez más exigente, que no sólo quiere irse de vacaciones, sino que quiere disfrutar de “sus vacaciones personalizadas”. Está claro que para poder mantener al turista satisfecho hay que adaptarse rápidamente a las necesidades que cada “cliente” necesita.
Como indicaba, ya no nos conformamos con el típico viaje, sino que buscamos la exclusividad y, sobre todo, mantener un recuerdo muy positivo para que cada viaje se convierta en una experiencia única y satisfactoria. Por otra parte, páginas webs que nos dan recomendaciones y valoraciones de zonas, hoteles, bares, restaurantes, espectáculos… y que casi todos conocemos, son de gran utilidad cuando estás perdido en una ciudad que no conoces y no sabes, principalmente, dónde comer o tomar algo cerca de donde te encuentras.
Los dispositivos que utilizamos conectados a Internet han dado un paso de gigante para que podamos conseguir estas experiencias. Nuestros dispositivos (tablet, móvil, ordenador) almacenan datos que se convierten en información muy útil para el sector (y para muchos otros) y nos “orientan” hacia determinados destinos o experiencias siempre que tienen ocasión. ¿Cuántas veces hemos buscado un hotel o un vuelo y, semanas más tarde, viendo otras páginas en Internet nos muestran información de esos mismos vuelos u hoteles? Bueno en mi caso, generalmente me aparecen ofertas de vinos, destilados y espumosos, por temas de trabajo/afición con www.comparandovinos.com.
Pensemos en cómo hemos cambiado nuestros hábitos en pocos años. Hasta no hace mucho tiempo atrás, nuestros viajes se planificaban de la siguiente forma: teníamos claro dónde ir y todo lo gestionaba “nuestra” agencia de viajes (era nuestra referencia); reservábamos nuestros “paquetes de viaje” o cosas sueltas (hotel y/o vuelo...) siguiendo las sugerencias de nuestro agente (y si el presupuesto nos lo permitía), en algún caso comparábamos el mismo paquete con otras agencias que nos merecían también nuestro respeto, garantías y consideración. Comprábamos sobre seguro y la garantía nos la daba la agencia que contratábamos.
Hoy por hoy, lo hacemos todo por Internet. Hay mil formas distintas de buscar un destino y mil formas de llegar al mismo sitio y mil opciones una vez allí. En general, buscamos sugerencias online de nuestro destino, leemos los comentarios de distintas personas que ni siquiera conocemos, pero que nos generan confianza por el elevado volumen de valoraciones, vemos las ofertas que existen en distintas webs o, mejor aún, como viene siendo tendencia, los buscamos en los llamados megacomparadores que, además, nos proporcionan opiniones que nos orientan sobre los pros y contras que se han encontrado y nos “arriesgamos” (debo decir que el grado de acertar es bastante alto) a reservarlo o contratarlo. Además, en muchos casos son ofertas puntuales que duran pocos días u horas… Pero no sólo eso, mientras buscamos nos ofrecen coches de alquiler y en algún caso excursiones y otros temas que, tal vez, nos puedan interesar.
Debemos reconocer que para muchos este tipo de información es abrumadora, pero ¿cuál es el principal problema? Esta información no es totalmente “inteligente”, sugiere opciones, pero es una información general, no integrada con lo que contratamos y, por supuesto, no siempre se ajusta a nuestras necesidades. En este sentido, los avances que estamos viendo gracias a Internet de las cosas (IoT) y Big Data y me atrevería a mencionar un término que cada día se escucha más, el “Smart Data”, son fundamentales para dar una vuelta de tuerca más a este asunto.
He introducido el concepto de Big Data y Smart Data (otro aspecto que ya está entre nosotros y ha vendido para quedarse) porque me ayudará a explicar lo que está llegando (y, según en qué sectores, ya se explota). La cantidad ingente de datos que generamos pueden convertirse en información muy útil para todos los sectores si se utiliza correcta y efectivamente. A veces no es necesario una gran cantidad de datos, sino unos datos de calidad y que estos resulten eficientes (los que algunos definen como Smart Data). El sector Turístico se está beneficiando y se beneficiará mucho más de IoT, Big Data y principalmente del Smart Data y, en este sector, transformará cada fin de semana, cada periodo vacacional, o puente en una experiencia extraordinaria y, sobre todo, “personalizada”, ajustada a nuestro perfil y gustos.
Y si os dijera que en poco tiempo nuestros dispositivos sabrán:
- Cuando disponemos de vacaciones: a través de la agenda de nuestros móviles (que a su vez están sincronizadas con todos nuestros dispositivos electrónicos).
- El estado económico y la evolución de nuestros ahorros, a través de las conexiones que hacemos por cualquier dispositivo a nuestros bancos y cuentas de ahorro.
- Dónde hemos tenido interés en ir, a través de lo que comentamos en nuestras redes sociales o búsquedas que hemos hecho o simplemente sitios que hemos visto a través de la publicidad en Internet o una combinación de las anteriores con otras fuentes de información sobre nosotros y nuestro núcleo familiar.
Y que con esta información, nos lleguen a nuestros dispositivos ofertas de viajes teniendo en cuenta la fecha, conociendo la previsión del tiempo que hará en destino, el tipo de destino que nos gusta hacer en esa época del año (montaña, mar, rural, aventura…), la categoría de hotel que solemos ir y las valoraciones de clientes que han estado por la zona o están (si la fecha es cercana), la gama de coche que alquilamos y, por supuesto, nos proponga una planificación de qué hacer cada día en función de las condiciones climatológicas de la zona y muchos más factores…
Seguro que creeríais que me he tomado algo y me ha afectado a la cabeza, ¿no? Y si, una vez en destino, llegamos al hotel y con solo pasar nuestro móvil por un terminal, se hace el check-in teniendo en cuenta nuestras preferencias y el recepcionista nos entrega una “pulsera”, o mejor aún, nuestro móvil se convertirá en la llave para abrir nuestra habitación, acceder al spa, gimnasio y demás dependencias y, por supuesto, recoge información de nuestro perfil para conocer el grado de confort que deseamos tener en la habitación (temperatura y humedad) y hasta decorarla de forma personalizada, registra las consumiciones que hacemos tanto del minibar como dentro del hotel y tantas cosas más… ¿qué diríais?
Seguramente que, además de tomarme algo, me he dado un golpe en la cabeza o es el trailer de una película futurista, pues… ¡NO!
Muchas de estas cosas que comento se pueden hacer, se están haciendo y probando. Por ejemplo: la visita a la habitación del hotel inteligente, instalada en el Eurostars Barcelona Design, estuvo incluida en el ‘Mobile Ready’, programa de actividades y experiencias smart asociadas al uso de los móviles que se ofreció en Barcelona con motivo del Mobile World Congress 2015 (¡hace más de año y medio!).
Esta misma revista, publicó un artículo en 2015 que se titulaba: Fiturtech 2015 expone el turismo en la era de Internet de las Cosas y Big Data. Pero, os comento, además, unos números del sector:
- Según estudio de Tata Consultancy Services (TCS), los ejecutivos representantes de las grandes industrias de turismo, esperan que sus organizaciones inviertan en promedio 128,9 millones de dólares en iniciativas de IoT en los próximos años.
- Según un estudio de IBM, IoT será la tercera tecnología que tendrán más peso en el futuro (en los próximos 3-5 años) por detrás de cloud computing y services, y soluciones móviles.
Como siempre indico en mis artículos, ¡IoT abre un abanico de oportunidades y experiencias que, junto a otras soluciones, nos harán conseguir experiencias únicas en un futuro muy cercano!
Dario Ferraté. Consultor TIC en el Ministerio de Defensa; director de Desarrollo de Negocio en la solución de Eficiencia Energética CEM de Cisco